Picapoll
El Picapoll, también conocida como piquepoul, es una variedad de vid que crece sobre todo en las regiones francesas del valle del Ródano y en Languedoc. En España lo encontramos como variedad autóctona de la pequeña denominación Pla de Bages y todavia es una gran desconocida. Una uva blanca de la que actualmente sólo existen menos de 50 hectáreas de viñedo en toda la denominación y de la que no hay muchas cepas antiguas, ya que la mayoría de los viñedos de esta variedad son experimentales y producto de un proceso de recuperación de clones.
Esta variedad no llegó a desaparecer del todo gracias a su particular piel gruesa. Una cualidad que no pasó desapercibida para los agricultores que antiguamente la conservaban para pasificar. Era una uva muy agradecida para ser colgada y durante el invierno podían ir comiendo de ella sin que le atacaran los hongos. La Picapoll tiende a ser una variedad productiva, por lo que se debe gestionar cuidadosamente en el viñedo, con podas cortas y cubiertas vegetales, incluso replanteando las densidades de plantación. Es también una variedad oxidativa y por tanto necesita una elaboración en bodega cuidada, limitando mucho su contacto con el oxigeno.
Cuando se la sabe tratar es una variedad que ofrece sobre todo complejidad. Fruta amarilla como el melocotón y el albaricoque, piña y algunos apuntes florales que no suelen encontrarse en los vinos blancos como los aromas de lavanda e hinojo. Los vinos de 100% Picapoll están ganando interés. Por ejemplo: lo que hace Bodegas Abadal con su monovarietal Picapoll es una excelente y asequible opción para conocer las posibilidades de esta variedad por descubrir aún.